Ruta con el Apu Pariacaca: lagunas, fauna y restos incas

Fuente: Vidayestilo.terra.com.pe
Foto: Jack Ventosilla

A más de 3500 metros sobre el nivel del mar, entre las Regiones de Junín y Lima, se encuentra una de las extensiones paisajísticas más importantes del país, donde la naturaleza se expresa en hermosos manantiales, imponentes cataratas, nevados y una invalorable cantidad de flora y fauna. Nos referimos a la Reserva Paisajística Nor Yauyos Cochas.

Bajo un hermoso cielo azul, la reserva ofrece a los turistas de espíritu aventurero una interesante ruta que se inicia a cuatro horas de Huancayo, precisamente en el distrito de Canchayllo, capital y paraíso de la “Puya de Raimondi”.

En ese lugar, o mejor dicho, cuesta arriba, se puede encontrar el interminable bosque de 230 mil puyas que relucen hermosas gracias a sus dorados tallos, el oro del Inca.

Y esa majestuosidad de la naturaleza  que tiene una vida de 100 años es, a la vez, hogar de innumerables aves como el picaflor andino o el colibrí gigante.

A escasos minutos de allí, se halla la Hacienda Pachacayllo, lugar dónde se cría generoso ganado vacuno para la producción de lácteos como queso, yogurt, manjar banco y mantequilla, que luego son comercializados por la Sociedad Agrícola de Interés Social (SAIS) Túpac Amaru, conformada por 15 comunidades campesinas.

Asimismo, la SAIS ofrece a los visitantes la oportunidad de realizar turismo vivencial con la pesca de truchas en piscigranjas. Hay más de 60 criaderos de truchas.

Muy cerca de Canchayllo, exactamente al lado del río Piñascochas, encontrarán el cañón de Shutjo, una enorme estructura de piedra caliza que solo los valientes se han animado a escalar. Una mole que también alberga a cientos de bandurrias.

Si continúa aguas más arriba, ya ingresando a la región Lima, a 4735 msnm se localiza el Abra Portachuelo, donde comienza un pequeño pedazo del Capac Ñan o Camino Inca y que, tras 18 días de recorrido, conduce hasta Pachacamac. A lo largo de ese camino de peldaños forrados en piedra se puede observar vicuñas, llamas, venados e incluso pumas andinos.

A pocas horas del lugar, por la carretera de penetración llegará al distrito de Tanta, “la Perla del Ande”, que se encuentra al lado del dios ancestral andino del Perú, el imponente Apu Pariacaca.

Pero antes de aproximarse al majestuoso nevado, hay que pasar por la zona de Pirja – Pirja, dónde aún se aprecian restos de los albergues que alguna vez acogieron a los incas y desde dónde realizaban los pagos a la tierra en honor al Apu.

Luego de hacer el respectivo pago a la tierra, el camino lleva hasta la laguna Piticocha, que donde se aprecia al Apu Pariacaca en todo su esplendor.

DATOS:

-Este recorrido turístico rural por la reserva es impulsado el Grupo Gea. Puede contactarse con ellos al 4671802 y al 4671975. También puede llamar a las asociaciones de Turismo Rural Comunitario de Canchayllo al 064 784087 o a la de Tanta al 997224557.

-Los meses de abril y mayo son los mejores para visitar la reserva.

Fuente:  Vidayestilo.terra.com.pe